Entre proyecciones del Cine de Oro y cuadros expresionistas de Christopher Caro, artista de la casa, el ambiente de La Justina se antoja ideal para que el frío de la calle nos espere un buen rato afuera. Nada como sentarse y pedir el «Bartender’s Choice», un cóctel personalizado según tu gusto por los sabores cítricos o dulces, o los destilados que mejor te sienten. El mixólogo estará atento a dar en el clavo con «tu drink».
Entrados en calor, siempre de la mano de los bien entrenados meseros, no hay que dejar pasar la popular Tostada de Pulpo zarandeado al grill, mayonesa de carbón y ceniza de vegetales, con una corona de cebolla morada curtida que le dan una altura inesperada a la tostada, evidenciando la base francesa de los platillos de La Justina.